Reunión de junio del BCE y otros eventos importantes a observar esta semana
Los participantes del mercado anticipan la reunión de junio del BCE, esperando que los funcionarios del Banco Central Europeo recorten las tasas por primera vez desde septiembre del 2019. Actualmente, la mayoría de los miembros de la junta votan por una flexibilización de la política monetaria, aun aquellos con actitudes más conservadoras. Es probable que el banco central recorte las tasas en 25 puntos básicos.
Cuando las tasas del Banco central europeo sean más bajas, la atención de los inversores se centrará en la orientación futura para ver si el BCE hará otros ajustes en el 2024. Cualquier indicio sobre futuros ajustes de la política monetaria, incluidos aquellos relacionados con el cumplimiento de los objetivos de inflación, presionará al EUR hacia abajo.
Sin embargo, el llamado «ajuste cuantitativo» sigue restringiendo las condiciones financieras en la unión monetaria. La inclusión del PEPP (Programa Pandémico de compras de emergencia) en junio expandirá este ajuste a un promedio de 7.5 trillones de dólares. El programa estará activo hasta diciembre del 2024. Comenzando el año que viene, la reinversión parcial será abolida, lo que a su vez, acelerará la tasa de disminución y pondrá presión sobre la oferta de dinero.
Los inversores esperan un recorte de 25 puntos básicos en mayo. Sin embargo, los pronósticos sobre futuros recortes de tasas aún están bajo cuestionamiento. La inflación frenó su tendencia bajista en mayo y algunos sectores centrales, incluyendo servicios, muestran señales de calentamiento. Con esto en mente, los funcionarios del BCE serán más cautos al tomar cualquier otra medida.
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¿Cumplirá Macklem, jefe del BoC, sus promesas?
El miércoles a las 9:45 AM, el Banco de Canadá (BoC) publicará su declaración de política, seguido de una conferencia de prensa a cargo del Gobernador Macklem, y el jefe ejecutivo Rogers, 45 minutos después. Esta reunión no incluye el reporte de la política monetaria, que será dada a conocer en la reunión del 24 de julio.
Las reuniones de junio, julio y septiembre son potenciales oportunidades para el BoC de implementar su primer recorte de tasas. Los mercados consideran parcialmente un recorte de 25 puntos básicos para esta reunión, y apuestan por un recorte total para julio, anticipando una flexibilización adicional para septiembre. Si bien el consenso está dividido, una ligera mayoría espera un recorte esta semana, nuestra predicción se inclina a mantener las tasas, con más posibilidades de un recorte en julio o en adelante. Apresurarse a realizar un recorte ahora presenta un alto riesgo en la política, y hay mucho para ganar al realizar una evaluación más profunda en julio.
Argumentos para recortar las tasas ahora
Varios factores respaldan un recorte de tasas para esta reunión. Primero, Canadá experimentó cuatro meses consecutivos de baja inflación, con el IPC ponderado mostrando ligeras caídas mes a mes. Algunos argumentan que esto indica una sofocación persistente de la inflación, justificando una flexibilización inmediata.
Desde una perspectiva de gestión del riesgo, si la inflación aparentan estar balanceada, puede ser prudente comenzar una flexibilización reconociendo la incertidumbre sobre el camino futuro. Este enfoque refleja la estrategia del ex gobernador Carney de 2010 de ajustar cautelosamente las tasas en respuesta a las condiciones económicas inciertas.
El gobernador Macklem históricamente ha respaldado rápidamente medidas flexibles a la primera señal de una inflación controlada. Su tendencia a actuar rápidamente en estos escenarios podría influenciar la decisión de recortar las tasas ahora.
Adicionalmente, la economía de Canadá ha mostrado señales de desaceleración, con el crecimiento del PBI muy pobre desde el Q4 del 2022 al Q4 del 2023. Esto podría indicar presiones inflacionarias tardías. Si se espera que estas condiciones persistan, quizás el BoC quiera comenzar la flexibilización pronto, dado los efectos tardíos de los recortes de tasas en el crecimiento y la inflación.
Finalmente, las expectativas del mercado juegan su papel. Con los estos considerando un recorte de tasas, el BoC quizás no quiera decepcionar.
Argumentos para esperar
Sin embargo, varias razones sugieren que el BoC debe ejercitar la paciencia. El gobernador Macklem ha enfatizado en la necesidad de con «meses» de futura evidencia antes de recortar las tasas. Reducirlas ahora contradeciría su orientación reciente, lo que podría socavar la confiabilidad del BoC.
Macklem resaltó un proceso de tres niveles para el recorte de tasas: primero, un periodo de inflación estable; segundo, confianza en que esta tendencia persistirá; y tercero. comenzar las discusiones de bajar las tasas. Actualmente, no está claro si todas las condiciones se han cumplido.
Dado los fallos pasados al predecir la inflación precisamente, el BoC debería demandar evidencia más sustancial antes de actuar. Los factores temporales, como un invierno inusualmente cálido, pueden haber influenciado el reciente camino estable de la inflación.
Previamente, el BoC ha mostrado disponibilidad para sorprender a los mercados de ser necesario. Para la reunión de julio, el BoC tendrá datos adicionales a la inflación, crecimiento del empleo, salarios, PBI y otros indicadores. Estos conjuntos de datos darán una mejor base para cualquier decisión.
Además, la reunión de julio incluirá encuestas actualizadas de actividad empresarial y expectativas de inflación, que son cruciales para las decisiones del BoC. El momento de esta reunión con pronósticos completos es ideal para un cambio significativo en la política.
Puede que el BoC también quiera considerar los resultados de los próximos comunicados del FOMC del 12 de junio. Si el organismo señala un ritmo más lento de recortes, quizás el BoC elija alinearse a sus acciones de manera acorde.
Finalmente, cuatro meses de inflación estable son insuficientes para concluir que es una tendencia bajista sostenible, especialmente dado el potencial impacto de factores temporales. La inflación en los hogares sigue alta, guiada por la inmigración y la escasez de inmuebles, algo que el BoC no puede ignorar.
Adicionalmente, la economía se ha desempeñado mejor a lo anticipado en la primera mitad del 2024, particularmente en el gasto del consumidor. Recortar las tasas ahora podría reiniciar el desbalance en el mercado inmobiliario, donde la demanda es altamente sensible a los cambios en las tasas.
Un recorte de tasas prematuro podría activar un rally en en el mercado de bonos a 5 años del gobierno de Canadá, conduciendo a condiciones financieras más flexibles y podría sobrecalentar el mercado inmobiliario. El BoC debe tener confianza en esta decisión antes de indicar el comienza del ciclo de flexibilización, dadas las implicancias significativas en el mercado.
En conclusión, si bien hay argumentos para un recorte de tasas inmediato, el hecho de esperar y recopilar más evidencia es más fuerte. El BoC debe priorizar una evaluación completa en julio para evitar riesgos asociados a una decisión apresurada.
El dato de empleo de EE.UU ¿Qué esperar de las cifras de mayo?
El próximo anuncio del reporte de empleo de mayo a las 8:30 AM del viernes se supone que sea un indicador crítico del estado del mercado laboral. Los analistas estarán escrutando el cambio en el empleo no agrícola para determinar si cumple, excede o falla respecto a las expectativas del mercado.
En abril, el empleo no agrícola se incrementó en 175.000, marcando una notable desaceleración desde el promedio del tercer trimestre de 269.000. A pesar de la caída, la tasa de crecimiento de abril aún refleja una contratación robusta para una economía que experimenta una expansión moderada.
Las proyecciones para mayo sugieren que es probable que el reporte revele un nivel similar en la creación de empleo. Si este fuera el caso, indicaría que el mercado laboral se está enfriando alineado con los pronósticos de los funcionarios de la Fed, ya que las condiciones económicas comienzan a estabilizarse y normalizarse.
Existen tres factores notables a considerar al interpretar el dato de empleo de mayo. Primero, el período de referencia para la recolección de datos abarca cinco semanas, desde el 13 de abril hasta el 18 de mayo. Esta temporalidad extendida puede incluir trabajadores adicionales, quienes fueron contratados más tarde en abril, pero recibieron su primer pago en mayo.
Segundo, dado que muchos universitarios consiguen empleo antes de la graduación, algunos pueden haber sido añadidos a las nóminas de mayo. Esta es una ocurrencia común, pero si las empresas han sido particularmente proactivas a contratar graduados con habilidades en demanda, esto puede resultar en cifras de las nóminas de empleo mejores a las esperadas.
Tercero, la celebración temprana del Día de los caídos este año (27 de mayo), puede conducir a una contratación precipitada en viajes y ocio, con las empresas añadiendo personal antes de las típicas temporadas de contratación.
Las implicancias para la política monetaria dependen de cómo los números de nómina se alineen con las expectativas del mercado. Si las cifras del empleo coinciden con los pronósticos, debería haber un pequeño cambio en la perspectiva de la política monetaria. Sin embargo, un reporte significativamente débil podría generar especulaciones sobre un pronto recorte de tasas. No obstante, sin la compañía del dato de inflación de mayo, tal anticipación quizás no sea prematura.
El índice de precios al consumidor (IPC) de mayo está programado para el miércoles 12 de junio a las 8:30 AM, y es probable que cumpla un rol crucial en dar forma a la declaración de política del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC) debido a que será a las 2:00 PM ET el mismo día.
Un mercado laboral débil combinado a la continua desinflación podría conducir al FOMC a considerar el momento oportuno para un recorte de tasas más seriamente. Contrariamente, si el mercado laboral es débil mientras el IPC se mantiene estable o sube, particularmente en los sectores inmobiliarios o no inmobiliarios, es probable que el FOMC adopte medidas más cautas. En tal escenario, los funcionarios quizás no sientan la suficiente confianza sobre la trayectoria de la inflación para justificar la flexibilización de la política monetaria inmediatamente.
En general, el reporte del empleo de mayo y el subsiguiente dato de inflación serán críticos en dar forma a las expectativas del mercado y guiar los próximos movimientos de la Reserva federal. A medida que surjan estos datos, darán ideas más claras sobre la salud del mercado laboral y la economía en general, influenciando como y cuando la Fed puede ajustar su política monetaria.